Comillas o cursivas

La letra cursiva o itálica es la que se inclina a la derecha.

Las comillas son un signo ortográfico de doble puntuación (abren y cierran) y sirven para variadas cosas en nuestro idioma, pero nos vamos a enfocar en las que, por lo general, se usan en las novelas.

Partamos con que en nuestro idioma tenemos tres tipos de comillas:

·         Las angulares ‹‹ ››

·         Las inglesas “ ”

·         Las simples ‘ ’

 

Aunque se pueden usar indistintamente, en Latinoamérica se usan más las inglesas y en España las angulares.

 

Lo que viene a continuación son normas, orientaciones y no reglas rígidas, por ello voy a colocar lo que más usamos como escritores de novelas.

 

1.      ¿Qué comillas usar?

Las que te queden más cómodas.

Por ejemplo, en España, como dije, se usan las angulares, pero en México, es casi inexistente este tipo y se usan las inglesas, en Chile, usamos cualquiera.  Pocas veces nos pasa en una novela, pero lo que sí debemos tener claro son los distintos niveles de oración para que sea coherente en todo el libro. ¿Qué significa esto? Que, cuando haya comillas dentro de las comillas, siempre se usen igual.

Ejemplo:

―Me dijo: ‹‹Perdóname, mi papá me amenazó: “Si no la dejas, la mato a ella y a su bastardo”. No podía hacer nada››.

Cada vez que use comillas, debe usar el mismo tipo y en el mismo orden, en este caso, primero las angulares, luego las inglesas y al final las simples.

2.      Como se vio en el ejemplo, se usan para las citas, siempre y cuando, la cita esté idéntica, se entrecomillan, pero si se cambia el tiempo o el adverbio, no.

Ejemplo:

―Me dijo que lo perdonara, que su papá lo había amenazado con que, si no me dejaba, me mataba a mí y al niño.

Cuando se parafrasea, no lleva comillas.

3.      También usamos la comilla para los pensamientos de los personajes desde el punto de vista del narrador.

Ejemplo:

―¡Fuera! ―gritó, “de mi vida”, terminó en su mente.

4.      Las comillas de cierre (››) se usan para cuando un diálogo es muy largo y requiere de punto aparte.

―La luna brillaba plena en el cielo ―comenté―por lo que no podía imaginar la desgracia que se nos venía.

››Por otro lado, Ricardo no pudo venir, ¿qué haremos con él?

5.      La cursiva se usa en todas o casi todas las otras opciones:

a.       Para llamar la atención sobre una palabra, que puede ser ironía:

―No, si tú eres muy cuidadoso, por eso jamás se te pierde nada.

b.      Para anglicismos o palabras mal escritas:

―Yo no estoy ni ahí con vo.

―No puedo creer que no tengas nada de glamour.

c.       Para nombres de mascotas:

Pedro tomó a Lulú para sacarla del granero.

d.      Para enfatizar:

―Sí se fue, bien por ella, nadie la echó.

e.       Para los nombres de libros publicados:

Me encanta Jane Eyre.

No así los libros sagrados:

Me he leído la Biblia completa, también el Corán y el Talmud.

 

Creo que eso es todo en cursivas o comillas, en lo que frecuentemente usamos, de todas maneras, si se me olvidó algo o quedaron con alguna duda, me lo ponen en los comentarios; en realidad, sus usos son tan extensos que es difícil abarcarlos todos aquí.

Ojo: ojalá que las cursivas, sobre todo las de énfasis y las de llamado de atención, no se usen en demasía, por más que uno crea que hay palabras que merecen atención, ponerlas en exceso es tratar al lector de poco imaginativo, hay que dejar que ellos también les den el énfasis que quieran o sientan. Además, podríamos terminar escribiendo toda la novela en cursiva.

Bueno, eso es todo, amigos, nos leemos en la próxima. Recuerden que, si quieren algún tema especial, solo deben ponerlo acá abajo. Espero sus comentarios, aunque sea un puntito para saber quién anduvo por aquí.

Besitos.